Si hay un país europeo similar al nuestro ese es Italia, por su clima, su gente, su arquitectura y su pasado histórico. La boda de hoy, celebrada en la ciudad medieval de Perugia, está inspirada en la elegancia y el glamour de la vieja Europa. Los novios no querían una boda al uso, más bien lo que buscaban era que sus invitados se sintieran como invitados a una cena especial y muy glamourosa, por eso Jemma huyó del típico vestido de novia y en su lugar, no pudo escoger mejor, lució un elegante vestido negro con una sobrefalda de quita y pon, una americana de paillettes del mismo color y un precioso cinturón dorado a juego con los zapatos. Realmente iba espectacular y el bouquet de rosas amarillas que acompañaba el conjunto daba el toque de color justo para la ocasión. El estilismo lo completaba un sencillo semirecogido lateral que daba a la novia un aire más distinguido y romántico. La ceremonia se celebró en el edificio del ayuntamiento, de estilo barroco, con arcos y columnas de piedra y una fachada que daba un sentido escenográfico a formas y volúmenes. Los clásicos Handel y Vivaldi estuvieron presentes en la música de la ceremonia, para dar paso unas horas después a la pieza que abrió el baile, Your Song de Elton John. Si hubo un recuerdo especial para los novios fue el romántico paseo que dieron tras la ceremonia, a pie por las calles de Perugia, recibiendo el cariño de sus habitantes mientras atardecía y la luz cada vez se iba haciendo más mágica. Un paseo que ocupará siempre un lugar especial en sus corazones, igual que las palabras ‘Tanti auguri!’ que no dejaron de escuchar durante toda la tarde y que quedarán siempre en su memoria en recuerdo de ese día único.

Fotografía: David Campbell Imagery