JEN & LUKE: UNA BODA BOHO-INDUSTRIAL
La decoración en las bodas va evolucionando cada temporada dando paso a nuevos estilos que muchas veces surgen de la combinación o la mezcla de varios de ellos, como es el caso de la boda de hoy. Una boda que he bautizado como boho-industrial porque comparte aspectos de ambas temáticas, empezando por el espacio, Carriageworks, una gran nave de más de 1.000 m2 con un altura de casi 9 metros que conserva las características originales del s.XIX y cuenta además con luz natural. Sus grandes dimensiones permiten que tanto la ceremonia como el banquete y la posterior fiesta se celebren en el mismo lugar, lo que es una gran ventaja sobre todo si os casáis en otoño o invierno ya que es algo que los invitados agradecen especialmente si hace frío o mal tiempo. Las paredes de ladrillo, desgastadas por el paso del tiempo y por el uso que a lo largo de los años se les ha dado, los altos techos y los grandes ventanales favorecen una decoración decadente que contrasta con el colorido de los detalles boho, como el arco de troncos de madera y flores, el camino de hojas de eucalipto presente también en la decoración de las mesas del banquete o el estilismo de la novia, con vestido de Lover y corona de flores. Me han gustado especialmente las damas de honor, amigas de Jen, con grandes ramos de eucalipto a juego con sus coronas, siguiendo la misma pauta estética marcada por la novia. En cuanto a la decoración general, muchas veces pensamos que si un espacio es demasiado grande nos costará mucho decorarlo pero si el espacio está bien elegido, nada más lejos de la realidad ya que en ese caso el espacio tiene que jugar a nuestro favor, convirtiéndose en el protagonista principal del hilo decorativo. Es lo que sucede en Carriageworks, donde se ha hecho especial hincapié en la iluminación, utilizando guirnaldas de luces y velas blancas para aportar calidez y dar la sensación estética de techos más bajos, un aspecto importante a tener en cuenta junto con la calefacción ya que por lo general estas naves antiguas no suelen estar bien acondicionadas y es necesario ambientarlas. Por lo demás, espero que disfrutéis de esta boda que a mí particularmente me ha encantado.
Fotografía: Dan O’Day