Buscando siempre su esencia, esa que le hace ser la persona especial que es, Immaclé viaja hasta la ciudad de Tánger para crear su nueva colección para novias inspirada en la pureza y en la naturaleza fuerte e indomable de esta bulliciosa ciudad hipnotizadora y llena de color. El ordenado caos de Tánger transforma a sus visitantes de la misma manera que la aguja de Immaclé teje los delicados patrones de unos diseños de aire bohemio en una colección que destaca principalmente la silueta y la sensualidad de la novia, dotándola de una sensibilidad y romanticismo especial. Sedas, blondas y plumeti son los tejidos protagonistas de esta novia romántica y con personalidad, embajadora de la fuerza del Mediterráneo, que tanto ama la diseñadora y que cada día contempla desde su atelier ubicado en un pequeño pueblecito costero de Barcelona. Las flores, las espaldas infinitas y las mangas japonesas y extra grandes están presentes en esta nueva colección pensada para bodas naturales, frescas y fuera de las normas preestablecidas. Unas espaldas sensuales e insinuadoras, que ya son marca propia de la firma y que llenan de magia todas sus creaciones de alta costura.

Fotografía: Marcos Sánchez y Serafín Castillo