Creo que una boda debe ser el reflejo de la personalidad de los novios y viendo este tipo de decoración tan especial, la idea que me viene a la cabeza es la de unos novios intimistas, delicados, detallistas y con un estilo fiel y muy personal. La decoración suspendida debe pensarse como algo muy sutil y minimalista, ya que normalmente debe sujetarse al techo con hilo de nylon, un material que pasa prácticamente inadvertido a simple vista. Ofrece múltiples opciones de ornamentación, con flor y cristal, como la de la fotografía, pero también puede jugarse con pequeñas velas, botellas antiguas, estrellas de mar para bodas de playa, pequeños marcos de fotos de aire vintage…, cualquier idea es válida si está bien resuelta. Este tipo de  decoración puede sustituir incluso el centro de mesa, en las fotografías podemos ver que se ha optado por duplicar la ornamentación floral, tanto en la mesa como en suspensión, pero yo hubiera suprimido los centros de mesa para dar más protagonismo, si cabe, a la decoración suspendida. Es importante tener en cuenta la iluminación si nos decantamos por este tipo de decoración, ya que debe seguir la misma línea, potenciando siempre los elementos decorativos de manera tenue y sutil.

Fotografía: Food+Flower+Style