Hay creaciones que acaban convirtiéndose en auténticas obras de arte y eso es lo que sucede con los diseños de Maya Hansen, que son verdaderas esculturas que realzan el cuerpo femenino de manera sensual y enigmática. De padre argentino y madre danesa, Maya Hansen se especializa como corsétière en el año 2006, cuando empieza a centrar toda la atención de sus colecciones en el corsé, una prenda íntima y muy femenina que, en sus manos, se transforma en un elemento fascinante y cautivador. Desde ese momento, Maya empieza a convertirse en el referente en España en diseño de corsés. De una creatividad inagotable, no es de extrañar que el día de su boda decidiera que sus creaciones tenían que estar presentes de alguna manera especial pero, ¿cómo? Si nos imaginamos el elemento más destacado de una boda seguro que pensamos en el vestido de la novia, pero si nos centramos en el momento del banquete probablemente imaginemos el pastel de bodas. Supongo que eso es lo que pensaría Maya a la hora de plasmar lo que tenía en mente: una manera distinta, original y sorprendente para que sus diseños centrasen toda la atención de sus invitados y, ¿cómo hacerlo? Pues elaborando 20 pasteles de boda, uno por cada mesa, que fuesen la réplica de 20 de sus corsés más emblemáticos. Y cuando un artista se pone a pensar, necesita de otro que sea capaz de plasmar sus ideas y Maya lo encontró en Sitges, una pequeña localidad de la costa barcelonesa, en un prestigioso taller de pastelería de diseño, Cakes Haute Couture. No podía ser menos. Su creadora, Patricia Arribálzaga, confecciona sus creaciones como si fueran trajes de Alta Costura a partir de un diseño personalizado y un delicado trabajo artesanal logrando auténticas obras de arte comestibles que, como los diseños de Maya Hansen, marcan tendencia y traspasan fronteras. ¡Os invito a que disfrutéis de esta combinación perfecta!

Fotografías: Marcelo Aquilio