Las bodas orgánicas y naturales encabezan las tendencias en decoración para esta próxima temporada que está a punto de comenzar. Bodas frescas, verdes, que respiran naturaleza, concienciación ecológica e interés por la vida sana en todos los aspectos. Una filosofía de vida que cada vez cuenta con más adeptos y que en las bodas está triunfando. La sesión de hoy es un editorial que refleja esta filosofía y que bien podría ser una boda real. Una combinación perfecta entre naturalidad y sofisticación, porque lo natural no debe estar reñido con la elegancia. En la decoración del espacio se utilizaron más de 60 tipos diferentes de flores, hiedra, plantas y árboles distintos para crear un paraíso botánico visual que a su vez contrastase con el aspecto industrial del entorno. Todas las vigas de madera del techo se han cubierto con hiedra y telas blancas semitransparentes para conseguir un ambiente suave y romántico. El fondo orgánico del espacio destinado a la ceremonia combina los verdes con el dorado y las velas, en perfecto contraste con las paredes de ladrillo vista, propias del estilo industrial. Las antiguas cajas eléctricas son uno de los rincones ideales de la sesión, se decoraron grietas y enchufes con distintas plantas y fue el lugar perfecto para ubicar la barra de bebidas. El mobiliario también contrasta con el blanco de las paredes y se ha jugado con una paleta neutra de tonos marfil, cuero y madera con toques de verde y dorado en los centros de mesa y candelabros. Y en cuanto a la estética de la novia, sigue la misma línea romántica tanto en el vestido con apliques florales y mangas semitransparentes como en el ramo de flores blancas y verdes y en el original tocado botánico a juego con el resto de elementos naturales.