Durante mucho tiempo han sido las grandes olvidadas en las bodas, en la mayoría de ellas quedaban incluso totalmente escondidas bajo fundas de un color blanco resplandeciente que ocultaban, en muchas ocasiones, auténticas joyas de madera, forja o cristal. Pero ahora empiezan a recuperar su sitio y se han llegado a convertir en un elemento destacado de la decoración nupcial. En ocasiones la calidad de sus materiales hace incluso innecesaria su decoración pero muchas veces, algo tan simple como un sencillo asiento puede llegar a convertirse en un elemento de referencia donde recaerán todas las miradas. Podéis decorar cualquier silla. Si decoráis las de la ceremonia, en este caso lo normal es decorar únicamente las que dan al pasillo y podéis hacerlo de mil maneras, con flores, jarritos de cristal, molinillos de viento, estrellas de mar, todo lo que vuestra imaginación contemple. Otra opción es poner sillas que ya de por sí decoren, como puede ser colocar los típicos bancos de Iglesia de madera oscura en una ceremonia al aire libre en el campo, quedan preciosos. También podéis decorar las sillas del banquete, todas o únicamente las de los novios, estas últimas suelen llevar además un cartelito en su parte trasera con las abreviaturas ‘Sr. y ‘Sra.’, ‘Novio’ y ‘Novia’ o ‘Mr. & ‘Mrs.’ En este caso, también podéis prescindir de las clásicas fundas y dejar las sillas a la vista, si queréis darle un aire minimalista y moderno a la boda, os aconsejo el modelo Victoria Ghost de Philippe Starck, pero si lo que pretendéis es darle un aire más retro o vintage está muy en boga la combinación de sillas antiguas de distintos modelos y diferentes materiales (en decapé, pan de oro, forja, etc.).
Fotografías: Studio B Photography, Ryan Price Photography, Jeff Wallace, Kate Harrison Photography, Joanna Brown Photography, Sloan Photographers, Ashley Rose, Troy Grover Photographers, Cameron Ingalls, Jill Thomas, Gabriel Ryan Photography, Simply Bloom Photography