Se acerca ya la época de bodas y seguro que muchas de vosotras estaréis enfrascadas en pruebas de vestido, envío de invitaciones, selección del espacio o del catering y un montón de cosas más, pero es frecuente dejar los pequeños detalles siempre para el final y es un error porque como ya os he comentado en más de una ocasión, la diferencia y lo que hace especial a una boda son precisamente esos pequeños detalles. Una de las cosas que por experiencia propia sé que suele dejarse para el último momento, y cuando digo último no os extrañéis que a veces sea el día anterior a la boda, es el cake topper o figura para la tarta. Para que eso no os suceda os recomiendo que lo miréis con tiempo o al menos que penséis en cómo lo queréis ya que luego es más difícil dar con el ideal y las opciones de ‘último minuto’ pueden llegar a arruinar estéticamente el pastel que con tanto mimo habéis escogido. El tutorial de hoy es muy sencillo y consiste en hacer un cake topper de aire vintage simplemente con un juego de té o café antiguo y poco más. Puede ser una buena ocasión para rendir homenaje a las vajillas de vuestras abuelas, esas que siempre están expuestas en la vitrina de sus casas cuando vais a visitarlas y que tanto os gustan. Vais a necesitar: un ramillete de flores frescas, un juego de té o café estilo vintage, espuma floral, un bol con agua, una rama, papel o cartulina, cinta adhesiva, pegamento, tijeras, rotulador y pegatinas o adornos para la etiqueta.
1. Recortar la espuma floral a un tamaño que quepa dentro de la taza de té. Hacer varios agujeros en la parte superior de la espuma para que el agua penetre mejor.
2. Colocar la espuma en un bol con agua, pegarla en la base con cinta adhesiva para evitar que flote y dejarla al menos una hora en remojo.
Fotografía: Picture Party