DIY: JARRONES CON POMOS DE CRISTAL
Cada verano, cuando vuelvo por vacaciones a casa de mis abuelos, me gusta pasarme una tarde abriendo arcones, cajones y armarios buscando pequeños objetos que con el tiempo van quedando olvidados en su interior. La verdad es que es increíble todo lo que se puede guardar a lo largo de una vida. Una de las cosas que encontré este año fue un pomo de cristal antiguo, estaba en una esquina en el fondo de un cajón y brillaba tanto que me quedé prendada. Debió pertenecer a algún mueble que por alguna razón ya no está en casa o quizás fue mi abuela la que lo encontró en algún sitio y decidió guardarlo. Ella lo guardaba todo y a mí me sucede lo mismo, así que estuve observándolo un buen rato disfrutando del reflejo que dejaba el cristal al paso de la luz que se colaba por la ventana. Me encantó y allí se quedó, a la espera de darle un día algún uso que todavía no tenía muy claro. Por eso, cuando hace unos días me topé con el tutorial que hoy os traigo enseguida me acordé del pomo de mi abuela y decidí que el próximo verano se transformaría en un mini-jarrón como los que vais a ver a continuación. Es una idea de decoración muy sencilla pero que puede dar un resultado precioso. Al tratarse de pomos y debido a su reducido tamaño, una vez que los hayáis preparado podéis colocarlos de manera individual o agrupándolos, yo os aconsejo que para dar más vistosidad en el caso de que queráis utilizarlos como centro de mesa, los agrupéis en grupos de tres. Otra opción que puede quedar muy bien es poner alrededor de ellos pequeñas velas de té, que además de calidez aportarán más brillo al conjunto al verse reflejadas en el cristal. Para empezar únicamente vais a necesitar: varios pomos antiguos de cristal, un destornillador y flores.
Pasos a seguir:
1. Rebuscar en casa de la abuela o en mercadillos de antigüedades hasta que encontréis varios pomos antiguos de cristal.
2. Con ayuda de un destornillador aflojar el tornillo que sujeta la varilla de apoyo y desechar esta última.
3. Volver a apretar bien todos los tornillos para evitar que se caigan a la hora de utilizar los pomos.
4. Limpiar bien la parte metálica con ayuda de agua caliente y jabón y si queréis darle más brillo emplear un limpiador de metales.
5. Poner una pequeña cantidad de agua a través del orificio del pomo y elegir las flores que más os gusten cortándolas a la medida precisa.
Y ya está! En apenas unos minutos tendréis varios mini-jarrones para decorar cualquier rincón de vuestra boda. Espero que os haya gustado la idea.
Fotografía e idea: Pretty Little Inspiration