Me gusta el ‘brilli brilli’, no lo puedo negar. Y en esta época todavía más, me imagino una boda de invierno y siempre pienso en algo glitter que la haga más especial. La verdad es que las lentejuelas y el brillo siguen de moda, tanto en estilismos como en decoración y la idea de decorar una boda con toques brillantes siempre le da un punto de glamour. Hay muchas opciones para conseguir una boda glitter, podéis empezar por el vestido de novia que si tiene buena figura se puede atrever con un modelo largo de corte sirena totalmente brillante o jugar únicamente con una parte del estilismo, como puede ser el corpiño, una torera o un complemento como los zapatos. Siguiendo con la novia, las más atrevidas también pueden usar el brillo en el maquillaje, hay unas sombras de ojos con purpurina que a mí me gustan mucho aunque he de decir que no a todo el mundo le quedan bien y hay que saber llevarlas y, sobre todo, combinarlas. Y pasando ya a la parte más decorativa aquí las posibilidades se multiplican ya que podéis utilizar desde mantelería confeccionada con lentejuelas hasta candelabros o centros de mesa con la base de purpurina hecha por vosotras mismas. En cartelería el brillo también puede dar mucho juego en las invitaciones, el Save the Date o el seating de mesa y en el catering también puede estar presente en forma de cake topper o presidiendo la mesa de postres con cupcakes decorados con polvo de purpurina o directamente sobre el pastel nupcial. En el post de hoy veréis ejemplos de todas las opciones para que os hagáis una idea del resultado pero, como todo, os recomiendo que uséis los brillos con moderación ya que si os excedéis lo único que vais a conseguir es algo muy recargado que no va a resultar lo que esperabais.
Fotografía: Kym Ventola, Gaia Design Studios, Michelle Edgemont, Emily Steffen, Clayton Austin, Jessica Lorren Photography, Olivia Leigh Photographie, Jill & Michael McNamara, Trouwplannen, Karen Bruckle Photography, Weddinggomania, Your cloud parade