Ya ha llegado el esperado 40 de mayo y parece ser que se cumplen las predicciones y, después de un fin de semana algo inestable, sale el sol y las nubes desaparecen. Apetece verano, playa, vacaciones y, por supuesto, bodas al aire libre y escenarios de película. El post de hoy está inspirado en bodas a la orilla del mar y tiene como protagonista la figura del faro. Yo siempre he fantaseado con la idea de vivir en un faro, creo que es uno de esos sueños que tenemos de pequeños, ¿quién no se ha imaginado viviendo en uno o recorriendo el mundo a bordo de una caravana? No sé porqué pero siempre me ha atraído esa imagen estática y rígida que transmite a modo de vigilante eterno, altivo pero siempre alerta y protector, una imagen que ha ido evolucionando en mi cabeza sobre todo a raíz de la película Lucía y el Sexo, seguro que a más de una os habrá pasado, ¿verdad? Si tenéis la oportunidad de casaros en la playa o cerca de un faro os animo a que lo hagáis protagonista de vuestro reportaje de bodas, es un escenario único que puede dar mucho juego a las fotografías y si encima tenéis la suerte de poder visitarlo por dentro mucho mejor. Pero todavía más ideal sería poder celebrar una boda en su interior, yo todavía no he tenido ocasión de ver ninguna, al menos en nuestro país, pero desde aquí os animo a que lo hagáis y lo compartáis. Hay que darle la vuelta a los típicos espacios y buscar escenarios que sorprendan porque en una boda el entorno es una de las cosas fundamentales. ¿Quién se atreve?
Fotografía: Bryan Johnson, Jaytsai Photography, Ozzy Garcia, Jared Wilson Photography, Cassandras Photography, Robb Duncan Photography, Sarah Culver Photography, Casey Fatchett Photography, Zofia Photo, O & C Photography