En muchas ocasiones cuando preparamos una boda nos damos cuenta de las distancias y nos vemos en la necesidad de contratar un transporte que lleve a los invitados desde el lugar de la ceremonia hasta el espacio donde se va a celebrar el banquete. Por lo general y debido al número de invitados, este transporte suele ser un autocar, pero a mi modo de ver es algo que encuentro más propio de un viaje de fin de curso que de un evento de la categoría de una boda. La verdad es que el parque automovilístico de alquiler en nuestro país no es muy extenso y no hay muchas opciones por las que poder decantarnos pero con algo de imaginación podríamos optar a algo diferente, como la idea que hoy os traigo. Es un autocar, sí, pero de aire retro, pintado con colores llamativos y con mensajes para los novios, tanto en su interior como en el exterior. De hecho me recuerda al típico bus turístico que podemos encontrar en muchas ciudades europeas, por lo que quizás no es tan difícil de localizar. Ya lo sabéis, si tenéis la suerte de dar con uno sólo tenéis que comprar unos botes de pintura y echarle imaginación.
Fotografía: Aregreyline Photography