Normalmente, cuando hacemos un sorteo en nuestro blog mi misión acaba en el momento en que los ganadores pasan a formar parte de la experiencia o regalo que acaban de ganar, pero el caso de hoy es diferente. Primero porque realmente el premio era algo tan excepcional, único y original que particularmente no me lo podía perder y segundo porque entre la empresa organizadora y UBO se creó un feeling especial que quisieron agradecernos invitándonos también a nosotros a un vuelo-aperitivo, servido por Nuclo, sobre el cielo de Barcelona. Dinner in the Sky es una plataforma formada por una enorme mesa imperial apta para 22 comensales, con zona de servicio de catering en su parte central, una de las experiencias gastronómicas más rompedoras del momento. Por primera vez aterrizaba en España dando la oportunidad a todo aquel que lo desease de disfrutar de un almuerzo, aperitivo o cena a 50 metros de altura, rodeados de unas vistas impresionantes de la capital catalana. La plataforma ya ha recorrido varias ciudades por todo el mundo como Las Vegas, Estambul, París o Mónaco y según los que ya han subido a ella, es una experiencia altamente recomendable sólo apta para personas sin vértigo. La cita en Barcelona fue el pasado sábado 5 de mayo junto a las fuentes de Montjuïc y el primer vuelo, el reservado para la prensa a las 10h de la mañana, fue el que pude personalmente disfrutar o casi padecer diría yo… Creo que no dejé de sujetarme a la mesa desde el minuto uno hasta que volví a notar mis pies sobre suelo firme, realmente la adrenalina hace que hasta la persona que tienes al lado de repente se convierta en tu mejor amigo, eso me sucedió con Mireia, la reportera de TVE, estábamos las dos tan nerviosas que sin conocernos de nada hicimos toda la subida cogidas de la mano. Al bajar ya estaban esperándome los ganadores de nuestro concurso, Sara y Artur, con sus vestidos de novios en espera de poder subir en el vuelo de las 12h. Estaban algo nerviosos, de repente se habían convertido en el centro de atención, las cámaras no paraban de enfocarles y varios periodistas les hicieron incluso alguna entrevista, todos los medios nacionales estaban pendientes de cualquier anécdota. Como la que sucedió un día antes con el vestido de Sara, un precioso modelo de YolanCris que permanecía guardado en la casa familiar por lo que cuando se enteró de que había sido la ganadora del concurso tuvo que llamar a su madre para que se lo hiciera llegar a tiempo desde Zaragoza a Barcelona. También la casualidad hizo que varios amigos de la pareja, entre los que se encontraba el padrino de su boda, estuvieran visitando el Salón del Cómic, por lo que pudieron entrar después a ver a los novios y cuál fue su sorpresa cuando los responsables de la organización les invitaron también a subir en la plataforma con ellos. Fue una mañana plagada de emociones que quedó grabada en la retina de todos los que disfrutamos de esta experiencia única, quedando resumida en una sola frase cuando en el momento en que la plataforma surcaba el cielo azul barcelonés todos los asistentes al unísono pronunciaron un rotundo ‘¡Vivan los novios!’.
Fotografía y vídeo: UBO