Todavía no ha llegado el verano pero ya estamos notando los primeros calores de la temporada, una época en la que cobra especial importancia el perfume y más si vais a celebrar vuestra boda en los próximos meses. Siempre que pienso en aromas me viene a la mente una frase del libro El Perfume de Patrick Süskind, que dice así: ‘Hay en el perfume una fuerza de persuasión más fuerte que las palabras, el destello de las miradas, los sentimientos y la voluntad’. Y es que la fuerza de un aroma va más allá de lo material, es la huella de nuestra propia esencia, por eso es tan importante elegir bien el perfume que nos va a acompañar siempre, ese aroma que cuando alguien lo huela, le recuerde a nosotros. El perfume ha pasado a formar parte de nuestro cuidado de belleza diario, dando paso a una serie de productos faciales, corporales e incluso capilares, cuyo aroma no sólo es portador de un agradable efluvio sino que en muchas ocasiones tiene añadidos otros beneficios. En el post de hoy os hablo de ello y os propongo 6 maneras distintas para perfumaros en verano.
Perfume
El perfume es el producto estrella sobre el que se basan todos los demás. Para la época veraniega mi recomendación es que optéis por fragancias frescas y naturales, sobre todo para vuestro día a día y también para vuestra boda. Los cítricos también funcionan muy bien pero hay que saber escogerlos porque no todas las pieles reaccionan igual a un mismo aroma, por eso es importante probarlos antes. Hay una marca en el mercado que me gusta especialmente para esta época del año, se trata de Sol de Janeiro. No sé si la conocéis pero cuando la hueles es como oler a verano, a sol, a playa, a trópico… Cierras los ojos y de repente estás en la playa de Ipanema. Además tiene una gran variedad de aplicaciones, tanto en perfume como en crema, gel o brumas faciales y corporales, por lo que es perfecto para cualquier momento porque uses el producto que uses siempre mantendrás la misma base.
Bruma corporal
Para mí la bruma corporal es de los mejores productos con aroma para combatir el efecto calor. Es una adaptación mejorada de la típica agua en spray que solemos utilizar en verano para refrescarnos. Eso sí, hay que procurar elegir un aroma suave ya que probablemente la utilizareis más de una vez al día y no es conveniente abusar del aroma en exceso. Algunas de ellas contienen además vitaminas e hidratan la piel.
Gel de baño
La gran mayoría de perfumes tienen también una línea de baño con el mismo aroma, lo que es ideal para completar el perfume corporal, ya que lo que no debe hacerse nunca es mezclar al azar distintas notas aromáticas porque el resultado no siempre es positivo.
Crema perfumada
Una de las grandes ventajas de las cremas corporales perfumadas es que, además de suavizar, nutrir e hidratar la piel, la impregnan de una fragancia especial. Algunas huelen tan bien que puedes llegar a prescindir del perfume porque dan la sensación de que el olor inunda todo tu cuerpo.
Aceite corporal
Los aceites corporales perfumados son ideales tanto para el día como para la noche, ya que están creados para invocar sentimientos, provocando una sensación de bienestar y relajación. Dejan la piel aterciopelada y con un brillo especial, algunos tienen propiedades antioxidantes y actúan como iluminadores corporales, lo que les hace perfectos para aplicar sobre todo en verano.
Perfume capilar
Cada vez más en tendencia, el perfume capilar neutraliza olores desagradables, aporta brillo, hidratación y nutrición y, además de perfumar, protege el cabello dejándolo suave y brillante. Es importante elegir bien el producto y aplicarlo a una cierta distancia para evitar que el cabello se apelmace o cree residuos.
Fotografía: Pinterest