Pensando en hacer un post para el Día del Padre y habiendo publicado ya alguno dedicado a ellos en estos años de trayectoria del blog, esta vez he querido ponerle un poquito de humor al asunto y dedicar el post a los hijos, porque un padre sin un hijo haciendo travesuras a su alrededor no es concebible. A muchos de vosotros que todavía no sois padres seguro que os ha pasado el ir de invitados a alguna boda y suspirar mirando hacia arriba con cara de disgusto cuando os han puesto junto a la mesa infantil. Sí, ya lo sé, es imposible mantener una conversación decente sin alzar la voz o comer medianamente tranquilo intentado evitar que migas de pan y otros objetos voladores no identificados caigan en vuestro plato o lo que es peor, en vuestra copa de cava, pero os apuesto a que cuando seáis padres vuestra percepción de la situación dará un giro de 180 grados y hasta encontraréis divertido y entrañable lo que antes os molestaba (doy fe porque a mí me ha pasado). En el post de hoy he querido recopilar distintas situaciones divertidas protagonizadas por niños en las bodas y es que, no nos engañemos, los niños son niños y para ellos acudir de invitados a una boda suele ser un rollo porque tienen que aguantar horas interminables de abrazos y besos de gente que no han visto nunca, buenos modales, poses de anuncio para las fotos y encima no pueden ensuciarse ni saltar ni gritar ni echar a correr, que seguro que es lo que más les gustaría hacer en ese momento. Menos mal que cada vez más ellos también van ganando su protagonismo y los novios llegan a montarles auténticas atracciones y corner kids para que su paso por la boda se les haga igual de inolvidable que a los mayores. No os perdáis la selección de fotos porque hay alguna con la que todavía se me saltan las lágrimas de risa cuando la veo.

Fotografía: ISPWP, Mine Forever, Mark Janzen Photography, David Murray, Porocna Agencija, Meb Photo, Calluna Events, Thomas Beaman Photogrpahy, Garrettross Photography, Diasporadical, Love my Dress