Una vez organizada la boda, toca pensar en la Luna de Miel. Seguro que hay un montón de destinos interesantes que queréis visitar y probablemente os sea complicado decidiros por uno. Según las estadísticas, los destinos más solicitados de Luna de Miel son destinos de playa, lo que no es de extrañar ya que la mayoría de parejas suelen casarse en verano. Pensando precisamente en lugares maravillosos a pie de playa y reivindicando una vuelta hacia lo natural y hacia los veranos pasados, hay un elemento que no debería faltar en vuestro viaje, y es la tradicional sombrilla de playa. Sí, ya sé que es la gran olvidada, pero precisamente por eso he querido aprovechar este post para reivindicar su uso y hablaros de unas sombrillas que me tienen enamorada desde la primera vez que las vi, son las sombrillas de Arena Stories. Una marca española que nace de la ilusión de recuperar este objeto tan nuestro, que verano tras verano acompañaba las vacaciones de tantas familias españolas y que con el tiempo, se fueron sustituyendo por sombrillas de usar y tirar, convirtiendo una pieza tan bonita en algo banal.

Las sombrillas de Arena Stories son una vuelta al pasado, al estilo de antes pero con calidades modernas. Los tejidos son naturales, lonetas 100% de algodón orgánico resistentes a los rayos del sol que permite la ventilación bajo la sombrilla, creando una sensación fresca. La trama del tejido de las sombrillas es tupida y frena el paso de los rayos uv sin necesidad de usar productos químicos ni tratamientos agresivos para el medio ambiente. Son desenfundables, para que se puedan lavar y volver a montar fácilmente y se venden con la bolsa a conjunto, además están diseñadas para envejecer bonitas al sol. La nueva colección ‘Happy Moments’, de estética retro, está inspirada en los tonos alegres de los veranos sesenteros, siguiendo un diseño y una estética similar a la de sus colecciones anteriores, ‘Summer Postcards’ y ‘Sand Love & Sunny Days’. Cada sombrilla está cuidada al detalle y todos los modelos han sido diseñados en Barcelona y producidos en España, en pequeños talleres que siguen trabajando con técnicas artesanales. Seguro que cuando las descubráis no dejaréis pasar un verano más sin ellas.

Fotografía: Arena Stories